- Año: 2008
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Fotografías:Derek Swalwell
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto demuestra la posibilidad de usar materiales reciclables sin comprometer la sofisticación de la comida y el servicio.
Tradicionalmente, el sake, una bebida japonesa, es envasado en barriles de madera que son asegurados y delimitados con cuerdas. A partir de esta idea se optó por investigar y traducir la interpretación de 'delimitación' con el uso de cuerdas de Manila. Las cuerdas en tensión en puntos específicos toman la forma de una casa o cabaña.
En el primer nivel, el área principal del restaurant, se encuentra el comedor, un bar, y el área de servicios. En este sector se utilizan cuerdas de Manila, madera y concreto. Las cuerdas fueron fijadas a vigas de madera en ambos extremos y colgadas de una varilla de acero a mayor altura en el medio del espacio. El techo y las paredes están terminados en pintura negra para enviar los elementos de servicio a la oscuridad del entorno.
Entre las cuerdas se instalan pequeños armarios de madera donde los usuarios pueden guardar sus bebidas, sin terminar, para la próxima visita. Con el fin de mantener el perfil de una casa, las cuerdas se instalaron con una separación definida por el ancho de estos armarios.
En el segundo nivel se encuentra un un área de autoservicio. En este espacio se ha querido lograr un sentido de sencillez para lo que se utilizan paredes blancas, suelo de madera negra, simples bancos de madera y marquesinas de acero inoxidable. No hay ningún intento de introducir adornos porque se esperaba que la cocina encarnara el propósito de este espacio.
Principios Sustentables
Las cuerdas de Manila son utilizadas para asegurar la carga. Una vez gastadas se retiran y se botan. Con este proyecto se quería demostrar que existen usos alternativos y que no es solo un material para asegurar los barriles de sake.